A pesar de que aún no tengo claro que especialidad escogeré dentro de la
Medicina, hay una enfermedad que preocupa a todos los profesionales de la salud,
tanto por su prevalencia como por sus múltiples complicaciones. Estoy hablando
de la Hipertensión Arterial (HTA). Con esta entrada, pretendo informar y
concienciar de la importancia de esta patología y justificar cómo la acupuntura
es eficaz para el control de la hipertensión.
Empezaremos
definiendo la HTA: se trata de una presión arterial sistólica (PAS) mayor o
igual a 140 mm Hg y/o una presión arterial diastólica (PAD) mayor o igual a 90
mm Hg. En la mayoría de casos se desconoce la causa y entonces la llamamos hipertensión esencial.
La
mayor parte del tiempo, la HTA no cursa con ningún síntoma por lo que el
paciente desconoce que la padece hasta que acude a su médico o le toman la
tensión en otro sitio. Por esta razón, muchas personas sufren cardiopatías,
complicaciones cerebrales o problemas renales sin saber que tienen HTA.
En la Medicina Tradicional China, la
HTA es una subida excesiva del yang o fuego hepático, es decir, la HTA está íntimamente ligada con el hígado y
su emoción.
Pese a que la HTA no
se puede curar de forma definitiva, hay unos hábitos de vida que, junto a la
acupuntura, pueden llegar a controlarla y evitar sus consecuencias. Gracias a
la acupuntura conseguimos activar el sistema parasimpático, por lo que
disminuye la frecuencia cardíaca y el volumen de eyección ventricular y varía
el calibre de los vasos.
Para evitar los factores de riesgo es importante que adoptemos unos hábitos de vida saludables. |
En resumen, la
acupuntura contribuye a un control de la tensión más eficaz en los pacientes
hipertensos e, igualmente, permite bajar a dosis de los medicamentos para la
HTA y, por tanto, evitar los efectos secundarios de los mismos.
Quizás
ahora te asalte la siguiente pregunta a la mente: ¿pero todo esto se ha
investigado realmente? La respuesta es sí: en un experimento reciente, los investigadores estimularon dos puntos de acupuntura
(IG11 y E36) en ratas de laboratorio con hipertensión y nefropatía intersticial.
Se comprobó que la acupuntura "disminuyó significativamente" la presión
arterial y los "daños renales".
Posteriormente,
se llevó a cabo un estudio similar con humanos. Se compararon tres grupos: el
grupo 1 recibió acupuntura; el 2 fue un grupo control y el 3 fue tratado con
fármacos. El grupo 1 mostró una disminución
significativa de la presión arterial y menos cambios morfológicos renales.
Por
último, otra nueva investigación llevada a cabo conjuntamente por la
Universidad de California en Los Ángeles y la Universidad de California de
Irvine determinó que la acupuntura reduce la HTA al disminuir el exceso de
actividad del sistema nervioso simpático.